La escalada parece no tener techo. La brecha cambiaria se ubica en 160%, el mayor nivel desde octubre de 2020.
Mientras referentes del mercado comienzan a pedir una devaluación, el dólar blue y los financieros siguen batiendo récords.
En el mercado marginal, la divisa llegó a tocar los $338 y terminó operándose a $337, con una suba de 20 pesos.
Las medidas cambiarias anunciadas por el Gobierno para que los turistas puedan vender sus divisas a valor del dólar financiero fueron ignoradas por el mercado, convencido de seguir subiendo la cotización hasta que el Gobierno reaccione con una depreciación fuerte del peso.
Los operadores consideran que el Banco Central debe convalidar lo que en los hechos está ocurriendo y devaluar.
La brecha cambiaria con el tipo de cambio oficial mayorista salta hasta el 160%, el mayor nivel en 40 años.
El Gobierno anunció que facilitará la liquidación de divisas de turistas extranjeros, quienes podrán vender hasta US$ 5.000 al tipo de cambio financiero (MEP).
También que mejorará las condiciones de acceso al mercado de cambios para el pago de importaciones de insumos para «sectores estratégicos».
El dólar informal había trepado otros $16 el miércoles, con lo que en las últimas tres ruedas acumula un avance sin precedentes de $45.
Analistas explicaron que los movimientos en el tipo de cambio responden a dos factores: por un lado una creciente desconfianza en el peso y la capacidad del gobierno de poder avanzar hacia equilibrios macroeconómicas que reduzcan el riesgo, y por otro un festival de emisión monetaria que viene realizando el Banco Central, que ha inundado el mercado de pesos.
Es decir, la gente no quiere pesos en los bolsillos y se apresura a comprar dólar o productos que cotizan en divisa extranjera, como los electrodomésticos o los autos.
La presión sobre el tipo de cambio se mantiene desde que el BCRA endureció el cepo cambiario a las empresas, a fines de junio, y se aceleró a partir de la renuncia del entonces ministro de Economía, Martín Guzmán, a principios de este mes.
La llegada de Silvina Batakis para ocupar su lugar, y el anuncio el lunes pasado de una serie de medidas que apuntan a reducir el elevado déficit fiscal, por ahora no han logrado calmar la tensión sobre los tipos de cambio paralelos.
Es que el mercado no cree que esas medidas se puedan implementar, sobre todo en áreas controladas por funcionarios que responde a la vicepresidenta Cristina Kirchner, que son quienes manejan los presupuesto más grandes, como la ANSES, el PAMI y Aerolíneas Argentinas.
Durante julio el dólar blue acumula un alza de $98, lo que representa hasta el momento su mayor avance mensual en el año, tras cerrar junio en $238.
En junio, el dólar informal avanzó $31 (+15%), luego de subir en mayo $6,50 ( 3,2%).
El dólar paralelo aumentó 50 centavos en abril, y cedió $11 en marzo, su peor performance en 14 meses.
En febrero último retrocedió $6,50 (-3%), después de ascender en enero $5 ó 2,4%.
En lo que va del año, el dólar informal avanza $128 después de cerrar el 2021 en los $208.
Durante el 2021, el dólar blue registró un alza de 25,3% ($42), la mitad respecto de la inflación del período (50,9%).
En 2020 había mostrado un brusco salto de 111% (frente a una inflación de 36%).
El dólar ahorro o dólar solidario -minorista más impuestos- subió 37 centavos a $224,37.
Por su parte, el nuevo dólar turista, que además del impuesto PAIS (recargo del 30%) tiene una percepción del 45% por el adelanto al impuesto a las Ganancias y Bienes Personales, avanza 40 centavos a $238,58.