El fiscal general Armando Agüero informó que se lograron recuperar 19 millones de pesos y que la víctima llegó a un acuerdo con el Banco Galicia respecto al crédito que le habían sacado los delincuentes.

Un empresario de Quemú Quemú fue víctima de una ciberestafa millonaria. Los delincuentes implementaron una sofisticada modalidad delictiva que involucró a una empresa de esa localidad y al Banco Galicia. El perjuicio alcanzó los 50 millones de pesos. DE ese total, se lograron recuperar 19 millones.

La víctima, uno de los propietarios de la firma afectada, experimentó una interrupción en el funcionamiento de su chip de celular, precisó El Diario. En busca de solucionar el problema, el hombre se dirigió a una empresa local en General Pico al día siguiente, donde le entregaron uno nuevo.

Sin embargo, al colocarlo en su aparato comenzó a recibir mensajes que revelaron una sorprendente realidad: se había aprobado un crédito de 50 millones de pesos a nombre de su empresa en el Banco Galicia, y la suma ya había sido retirada y distribuida a múltiples cuentas, recordó el medio citado.

El fiscal general de la Segunda Circunscripción Judicial de la provincia, Armando Agüero, informó en declaraciones al portal En Boca de Todos que se lograron recuperar 19 millones de pesos en el marco de la investigación. Además, señaló que la víctima llegó a un acuerdo con el Banco Galicia respecto al crédito que le habían sacado los delincuentes, que le permitirá gestionar la devolución de la suma restante y resolver la situación financiera generada por la estafa.

De acuerdo a lo que se pudo conocer de la maniobra perpetrada, el modus operandi de los delincuentes demuestra un alto nivel de sofisticación.

Después de obtener los datos de la víctima de la red, incluyendo documentos, CUIT y otra información relevante, los estafadores se comunicaron con la empresa proveedora de telefonía para autorizar un nuevo chip. Una vez obtenido, lo utilizaron para acceder a todas las cuentas del afectado y gestionar el abultado préstamo con la entidad crediticia.

Fuente: El Diario y En Boca de Todos