En un profundo acto de solidaridad en medio de la tragedia, dos equipos de ablación del Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (INCUCAI) trabajaron este lunes en el Hospital René Favaloro para concretar la donación de órganos del menor de 13 años que sufrió un disparo accidental en Jacinto Arauz el pasado viernes.
La ablación se realizó luego de que las autoridades médicas confirmaran el diagnóstico de muerte cerebral del adolescente. La información fue confiada este lunes a El Diario por fuentes hospitalarias.
El menor había ingresado al Hospital Favaloro en Santa Rosa en estado crítico tras ser herido de gravedad por un disparo de arma de fuego en circunstancias que se investigan.
El incidente ocurrió alrededor de las 19:45 horas del viernes en el noreste de Jacinto Arauz. Según las primeras versiones, el joven se encontraba cazando patos en un canal junto a otro adolescente de 14 años cuando el arma se habría accionado de manera accidental, hiriéndolo.
A pesar del esfuerzo médico, el pronóstico inicial reservado se confirmó en las últimas horas como muerte cerebral, abriendo el camino para la ablación de órganos tras la decisión de la familia de dar su consentimiento para la donación.
El hecho es investigado bajo la supervisión de la fiscal Paula Ducher. El jefe de la Unidad Regional III, David Rinaldi, confirmó que la policía tomó intervención tras ser alertada por una joven que escuchó gritos de auxilio.
En la escena del hecho, personal policial incautó un rifle de aire comprimido calibre .22, balines, zapatillas, un celular y dinero.
La fiscal ordenó la intervención de la Agencia de Investigación Científica (AIC) para formalizar el secuestro de los elementos y realizar las pericias destinadas a establecer la dinámica exacta del disparo.
Mientras la justicia avanza en la investigación, la ablación representa un gesto humanitario de la familia del menor, que transformará la tragedia en la posibilidad de salvar otras vidas.
El Diario




